La calidad es el núcleo de nuestra organización. Único en el mercado, cada herramienta procesada en GTRS se controla cuatro veces a lo largo del proceso:
- En la recepción: caracterización del desgaste inicial,
- Después del afilado: verificación del desgaste residual, rebabas y control de las preparaciones,
- Control geométrico: medición completa en Klingelnberg o Wenzel con informe,
- Después del revestimiento: control de la adherencia, impactos y radios de los filos de corte.
Proporcionamos para cada herramienta un informe de medición detallado y aseguramos una trazabilidad total a través de nuestro ERP «Follow-Me».
Esta exigencia garantiza a nuestros clientes herramientas conformes, fiables e inmediatamente listas para volver a la producción, sin comprometer la calidad.




